¡A pasear! Una actividad muy importante y al mismo tiempo muy atractiva, es organizar y llevar a cabo una visita a un sitio natural, como parte de la formación de tus Guardianes del Patrimonio Natural. Esto es así porque, al igual que otras actividades del curso, la visita física es una experiencia práctica, y por ello, hay que aprovecharla lo más posible. En México, como ejemplo, puedes elegir distintos sitios según el lugar donde vivas. Pensemos que vives en la Ciudad de México, eso significa que puedes pensar en planificar la visita a un sitio de Patrimonio Mundial, como Xochimilco, en su parte natural. En ese mismo entorno de Xochimilco, existe un sitio Ramsar (una categoría internacional para humedales de relevancia), que es el Sistema Lacustre Ejidos de Xochimilco y San Gregorio Atlapulco. Pero hay otros sitios dentro de la Ciudad, como Chapultepec o el Ajusco, o el Desierto de los Leones.
Con base en los recursos que dispongas, elegirás un lugar, y debes prever lo necesario, desde el permiso y participación de los padres o tutores de tu grupo de Guardianes, hasta los costos de entrada, si existen, el transporte, reservar la visita, horarios, etc.
Por supuesto, deben planear entre todos, qué cosas serán más importantes de ver, observar. Por ejemplo, en el sitio Ramsar, existe un centro de educación ambiental. Si vives en una región cercana a un sitio de Patrimonio Mundial Natural, como la Reserva de la Biosfera de la Mariposa Monarca, o si en tu comunidad hay cerca un parque nacional, un santuario de vida silvestre, o una playa o un volcán, lo importante es que la visita y la experiencia vaya prevista de conocimiento, de todos los detalles y permisos (otro ejemplo: los alimentos necesarios). Esa visita, además, derivará una “memoria digital”, que podrá compartirse con todas las personas, para contagiar de entusiasmo a otros Guardianes del Patrimonio.