Bola de Fracciones es la última propuesta de Playful Learning Landscapes que fomenta el aprendizaje lúdico, físicamente activo y corporal de las matemáticas. Repintando las líneas de una cancha de baloncesto estándar, los niños deben sumar fracciones y decimales y convertir entre fracciones y decimales para anotar puntos para su equipo.
El arco tradicional de 3 puntos se convierte en un arco de 1 punto y arcos más pequeños, más cercanos a la canasta, representan tiros de 1/4, 1/2 y 3/4 de punto en un extremo de la cancha, y tiros de 1/3 y 2/3 de punto en el extremo opuesto. Los números se presentan como fracciones en un lado de la cancha y como decimales en el otro, por lo que los alumnos deben convertirlos. A lo largo del lateral de la pista, una recta numérica con representaciones fraccionarias y decimales ayuda a los alumnos a llevar la cuenta de su puntuación.
Los alumnos que jugaron a Bola de Fracciones como parte de su clase de Educación Física como complemento a las lecciones de matemáticas en el aula lograron avances significativamente mayores en la conversión de fracciones a decimales, de decimales a fracciones y en otras habilidades relacionadas, como la suma de fracciones y decimales.
Bola de Fracciones, como todos los Playful Learning Landscapes, utiliza una fórmula de diseño de 3 partes:
1. Cómo aprenden los niños
Significativo
Participativo
Socialmente interactivo
Iterativo
Divertido
2. Qué aprenden los niños
Comunicación; Contenido; Pensamiento crítico; Innovación creativa, Confianza, Colaboración
3. Valores de la comunidad
Un diseño exitoso incorporará las 5 cualidades de CÓMO aprenden los niños, y al menos 1-2 de las 6C que definen los objetivos de aprendizaje, o QUÉ necesitan aprender los niños para prosperar. Bola de Fracciones incorpora las 6C: Colaboración y Comunicación (los niños juegan juegos estructurados en equipos para conseguir diferentes objetivos), Contenido (fracciones, decimales, aritmética, líneas numéricas), Pensamiento crítico (pensar qué tiros necesita para alcanzar su objetivo de la manera más eficiente), Creatividad (inventar nuevos juegos/objetivos utilizando la cancha, por ejemplo, añadiendo una bola que multiplica todos los tiros por 2) y Confianza (jugar con fracciones y decimales de una manera lúdica mejora la confianza cuando se encuentran con ellos en el aula).
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